Sharief Jackson pierde la vida tras un tiroteo en Queens, mientras la violencia se intensifica en Hell’s Kitchen
En un impactante episodio de violencia, Sharief Jackson, un hombre de 35 años, fue asesinado a tiros durante una confrontación con un rival en Hell’s Kitchen. El incidente ocurrió en un contexto de aumento alarmante de la criminalidad en este vecindario de Manhattan, lo que ha dejado a residentes y autoridades profundamente preocupados.
Jackson fue encontrado frente a su edificio de cinco pisos, ubicado en la calle 49, entre las avenidas 8 y 9, desangrándose y aún consciente tras recibir dos impactos de bala en el pecho. El tiroteo ocurrió poco antes de las 3:00 de la madrugada, según informó el Departamento de Policía de Nueva York (NYPD). Los paramédicos lo trasladaron de urgencia al hospital NYC Health and Hospitals/Bellevue, donde lamentablemente fue declarado muerto.
Momentos de terror en la madrugada
Vecinos del área describieron la noche como aterradora. Según un testigo, se escucharon gritos seguidos por tres disparos que rompieron el silencio de la madrugada. La escena quedó marcada por la presencia de autoridades y la cinta amarilla que delimitaba el lugar del crimen.
“Es desolador que estas cosas estén sucediendo aquí. Hell’s Kitchen era un lugar más seguro y vibrante”, comentó Thomas Kurilla, un residente de 67 años que ha vivido en el vecindario por décadas. Otro vecino, al salir del edificio donde Jackson residía, expresó su temor por la creciente inseguridad. “Espero que esta situación cambie. Esta calle solía ser un lugar mejor”, mencionó antes de compartir que planeaba irse de vacaciones a Australia, aliviado de alejarse del ambiente actual.
Aumento de la criminalidad en el distrito
Este asesinato refleja una preocupante tendencia en Midtown North, donde los homicidios han incrementado un 66.7% este año en comparación con 2023, registrando cinco casos hasta el 15 de diciembre, según estadísticas del NYPD. Además, delitos como robos, asaltos, violaciones y allanamientos también han mostrado un aumento significativo, dejando a los residentes cada vez más desconcertados por la violencia que parece revivir los oscuros años 80 en la ciudad.
El trágico caso de Jackson resalta no solo la gravedad de los problemas de seguridad en Hell’s Kitchen, sino también la necesidad de medidas urgentes para proteger a sus habitantes y restaurar la tranquilidad que alguna vez caracterizó a este vecindario.
Por: Francisco Núñez, franciscoeditordigital@gmail.com