Hoy, en Costa Rica, más de 30 países han firmado un comunicado en el que piden legislación internacional que incluya prohibiciones y normas en relación con el desarrollo y el uso de sistemas de armas autónomos. Como reacción a este hecho, Agnès Callamard, secretaria general de Amnistía Internacional, ha declarado:
“El desarrollo de la autonomía en las armas se está acelerando, y la creciente aplicación de nuevas tecnologías de inteligencia artificial y aprendizaje automático resulta sumamente preocupante. Estas máquinas amenazan con matar de manera automática, como si fuera una tarea técnica, y eso plantea riesgos en materia de derechos humanos y preocupaciones humanitarias, jurídicas y étnicas. Las máquinas autónomas tomarán decisiones de vida o muerte sin empatía ni compasión.”
“Los sistemas de armas autónomos no tienen la capacidad de analizar la intención de una acción humana. Tampoco pueden tomar decisiones complejas sobre la distinción y la proporcionalidad, determinar la necesidad de un ataque, negarse a cumplir una orden ilegal o reconocer potencialmente un intento de rendirse, elementos todos ellos fundamentales para cumplir el derecho internacional de los derechos humanos y el derecho internacional humanitario.”
“Estas nuevas tecnologías armamentísticas amenazan con poner en un peligro aún mayor a las personas e infraestructuras civiles en caso de conflicto. Amnistía Internacional sigue sintiendo preocupación por los posibles riesgos para los derechos humanos que plantea el aumento de la autonomía de los materiales de seguridad y control policial, como los sistemas que utilizan datos y algoritmos para predecir delitos.”
“Nunca ha sido más urgente trazar líneas rojas legales en torno a la producción y el uso de sistemas de armas autónomos para garantizar que mantenemos un control humano significativo sobre el uso de la fuerza.”
“Amnistía Internacional apoya el llamamiento realizado hoy por gobiernos de Latinoamérica y el Caribe para que se establezcan controles jurídicos internacionales vinculantes sobre estas armas, y recibe con satisfacción la decisión de trabajar en foros alternativos, más allá de la Convención sobre Ciertas Armas Convencionales (sobre la que se han paralizado las conversaciones), para promover esta nueva ley.”
Información complementaria
La Conferencia Regional sobre el Impacto Social y Humanitario de las Armas Autónomas, que se celebra en San José, Costa Rica, es la primera de este tipo y en ella han participado gobiernos regionales y observadores, y representantes de las Naciones Unidas, el Comité Internacional de la Cruz Roja y la sociedad civil. Amnistía Internacional es miembro fundador de Stop Killer Robots, una coalición global de más de 160 organizaciones que trabaja para abordar la autonomía en los sistemas de armas.
es.amnesty.org