25 de abril de 2025 – Investigadores de la Universidad de Linköping en Suecia han desarrollado una batería fluida que puede moldearse como pasta de dientes. Utilizando electrodos líquidos, esta batería blanda y moldeable puede ser integrada en dispositivos electrónicos mediante impresoras 3D.
Con la proliferación de dispositivos conectados a internet, que se estima alcanzará más de un billón en diez años, la necesidad de baterías optimizadas es urgente. La nueva batería desarrollada por Aiman Rahmanudin y Mohsen Mohammadi ofrece una solución flexible y eficiente, mejorando la experiencia del usuario.
Los detalles técnicos se publican en Science Advances.
La capacidad de adaptarse a cualquier forma permite que estas baterías se integren en dispositivos de manera más eficiente, aprovechando al máximo el espacio disponible. Esto es especialmente útil en dispositivos portátiles y wearables, donde el espacio es limitado.
Además, la flexibilidad de las baterías también mejora la durabilidad de los dispositivos. Al no tener una forma rígida, las baterías pueden soportar mejor el desgaste y los impactos, lo que prolonga la vida útil de los dispositivos.
En el ámbito médico, esta innovación puede revolucionar la forma en que se diseñan los dispositivos implantables. Las baterías flexibles pueden adaptarse mejor al cuerpo humano, reduciendo el riesgo de incompatibilidades y mejorando la comodidad del paciente.