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La Organización de Naciones Unidas advirtió que las condiciones en el Centro de Detención de Ciudad Juárez no tenía las mejores condiciones para albergar a seres humanos.

Esta semana el Comité de la ONU para la Protección de los Derechos de los Trabajadores Migrantes lamentaron, tras la tragedia de Ciudad Juárez, que las autoridades del Gobierno de Manuel López Obrador no acataran las recomendaciones que hizo la organización en la que cuestionaban las condiciones de varios centros detención, entre los que está el que se incendio y fallecieron 40 personas.

Varios expertos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) especializados en derechos para migrantes afirmaron que la mayor prioridad que debía tener las autoridades migratorias de México era la de mejorar las condiciones de vida en esos lugares. El Comité de la ONU dijo que en 2017 y en 2022 expresó su preocupación por el patrón de detenciones de migrantes y pidió a las autoridades que el encierro de éstos fuese una medida de último recurso por periodos cortos.

De acuerdo a una encuesta realizada por el diario mexicano, El Financiero, al menos 27% de los mexicanos responsabiliza al Gobierno de López Obrador por la muerte de 40 inmigrantes en el incendio, aunque 56% de los mexicanos encuestados aprueba la gestión de la catástrofe del presidente Andrés Manuel López Obrador. Pero un 21% de los 1,500 ciudadanos adultos encuestados afirmó que la culpa del incendio que desembocó en la tragedia fue culpa de los propios inmigrantes.

Las autoridades del gobierno sostienen su versión en la que fueron los inmigrantes retenidos en el centro quienes iniciaron el fuego que causó la muerte de las 40 personas. El 39% apuntó a la responsabilidad de los agentes del Instituto Nacional de Migración por no abrir las rejas, como se ve en los videos cuando los guardias huyen de la escena con las víctimas en las celdas.

Ante esto la Arquidiócesis de México publicó un comunicado de prensa en el que hizo un llamado al Gobierno de México, autoridades municipales, estatales y federales, “a dejar de ver a los migrantes como criminales“. “Hacemos un llamado a los tres órdenes de gobierno (…) a sumar esfuerzos para que se establezcan las acciones enfocadas en el bienestar de los migrantes“, señala el comunicado de la Arquidiócesis mexicana.

Cuando ocurrió la tragedia  Emilio Álvarez Icaza Longoria, senador mexicano, afirmó que este hecho habría sido provocada por la falta de atención, negligencia y simulación de las autoridadesSe violan los derechos, se separan a las familias (…) se maltratan a los migrantes (…) Eso es un crimen de Estado. ¿Qué tiene que pasar para que cambie la política?“, dijo el legislador durante una sesión del Parlamento de México.

Con información de EFE

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